Decenas de miles de madres venezolanas (y muchos padres de familia también) han levantado a sus hijos trabajando duro, haciendo y vendiendo arepas.
No derrochando a costa del erario público, sino trabajando. Como Doña Petra o la señora Luisa. Han vendido sus arepas honestamente a precios que hoy están entre 10 y 12 mil bolívares, dependiendo del relleno. En el Portón de Alcasa, donde hay muchos pequeños negocios populares de empanadas y arepas, valen entre 10 y 12 mil cada arepa rellena. En Sidor me dicen que hay unos vendedores que las ofrecen desde 8 mil. En el Portón de Bauxilum humildes trabajadores las venden a 10 mil. Hay locales comerciales que ofrecen más comodidades (que significan costos como aire acondicionado, empleados, servicios, etc.) y las venden a 15 o 18 mil. Conozco un sitio que hace unas enormes y sabrosas arepas con tremendo relleno. Una sola de ellas, por sí misma, es un almuerzo completo y vale 20 mil. Todos trabajan y se ganan la vida honestamente.
El presidente Chávez y el ministro Samán inauguraron una “arepera socialista” donde cada arepa se venderá a 5 mil. Dijeron que “este el precio justo para combatir a los explotadores y especuladores que las venden por más de ese precio”. Así calificó Chávez una y otra vez, repetidamente, a quienes vendan una arepa en un precio mayor a 5 mil. Según las palabras de Samán y Chávez, “el costo de una arepa con queso o caraotas, incluyendo salarios de empleados, electricidad, gas, alquiler de local, es de 2 bolívares con 20 céntimos. Y una de pollo o carne es de 3.50. Y una de pernil es de 4.20”. La TV mostraba un local comercial muy amplio y moderno y hasta con detalles de lujo publicitario. Con máquinas de amasar, numerosos empleados y muchas comodidades para el cliente. ¿Pagar esa enorme inversión (y recuperarla), así como todos esos costos, más la harina de maíz, el aceite, los guisos y rellenos cuesta entre 2 y 4 Bs.F. por arepa? ¿O todo es subsidiado con dineros públicos para hacer un acto de propaganda y demagogia política que pretende justificar la destrucción del esfuerzo de las personas que trabajan por su cuenta sin depender de las limosnas del gobierno?
“No les vamos a cerrar sus areperas pero vamos a competir con ellos vendiendo la arepa a 5 Bs.F.”, decía Chávez muy sonreído. ¿Eso no es competencia desleal prevalidos del poder del dinero del estado? ¿Cuántas “areperas (falsamente) socialistas” se necesitarán en toda Venezuela para enviar a la ruina a miles y miles de “doñas Petras” o a pequeños empresarios? ¿A cuáles obras públicas se le arrebatan recursos?
Escrito por:
Damian Prat
eso es otro acto del payaso mas famoso de Venezuela, acompañado del titiritero del Semen. Dentro de poco no se hablará mas de la arepera socialista, asi como se olvidaron de los gallineros verticales, los cultivos hidropónicos en las plazas, etc, etc.
ResponderEliminarYa a Chávez se le acabó la gracia y cada día lo que da es pena, nadie le celebra sus estupideces.